Y un día leí:
Venga, pongámonos serios.
Estamos solos, unidos en la soledad que más da.
Seguimos sin un rumbo marcado, pensando que dejarse llevar es la mejor opción;
pero no sabemos que eso nos llevará a la mayor perdición.
No podemos estar navegando a la deriva, ni tampoco a contracorriente,
así que pongamos las cartas sobre la mesa:
¿me quieres? no digo que me quieras atar, ni que me secuestres solo para tí,
digo, ¿me quieres?¿ quieres compartir tu tiempo y fundirlo con el mio para que sea más largo
esos segundos que transcurran mientras nos besamos con esas nubes propias de aquí
como testigos? ¿quieres pasear de la mano delante de tus amigos y presumir de la felicidad
que desprendemos con solo estar en contacto? ¿quieres quemar una flor que me regales con solo entrar en el calor sofocante que nos rodea?